Control Parental y Seguridad en Línea, Equilibrio entre Pantallas y Actividades Físicas, Tecnología y Niños, Uso Seguro y Beneficios de la Tecnología

El efecto de las pantallas en los niños

Las pantallas y los niños

Largo se ha escrito y dicho sobre el uso de pantallas y los niños.

Y es que los últimos estudios señalan que cuanto más expuestos están los niños a las pantallas más problemas de autocontrol, déficit de atención, problemas de ansiedad, mayores niveles de depresión infantil, insatisfacción con la imagen corporal y mayor fracaso escolar tienen.

Además, los últimos estudian han relacionado el uso de las pantallas en los niños con problemas de desarrollo cerebral, ocular y de aprendizaje.

¿Cómo enfocar el uso de las pantallas?

¿Cómo podemos pues hacer que nuestros hijos tengan una relación sana con las pantallas?

En este artículo, la UNIR, comentaba consejos sobre cómo enfocar el uso de pantallas en casa:

  • Evitar el uso de pantallas a menores de 18 a 24 meses (excepto videoconferencias).
  • Niños entre 18 y 24 meses, elegir sólo aplicaciones de alta calidad educativa y usar siempre en interacción con el adulto. Menos tiempo mejor.
  • Niños de 2 a 5 años limitar el uso de las pantallas a 1 hora al día como máximo, siempre con programa educativos de alta calidad, recomendando que el adulto interaccione con ellos y le ayude a comprender el contenido. Menos tiempo es mejor.
  • Niños de 6 años en adelante, establecer límites de tiempo claramente definidos. Podemos poner un despertador para acordarnos y darnos cuenta de que ha pasado el tiempo.
  • Apagar las pantallas y televisores cuando no se estén utilizando.
  • Tener los dormitorios, la hora de la comida y el tiempo de juego libre de este tipo de dispositivos.
  • No usar pantallas una hora antes de ir a dormir.
  • Evitar su uso como estrategia usual para calmar al niño.
  • Seguir la regla 20-20-20: asegurarse de mirar objetos situados a unos unos 6 metros, cada 20 minutos y durante, al menos, 20 segundos. En el caso de niños pequeños, es conveniente fijar algún tipo de alarma o recordatorio que obligue al niño a levantar su mirada.
  • Los niños deben pasar un tiempo diario realizando actividad física que debe ser de, al menos, 180 minutos en niños de 1 a 5 años y de 60 minutos de 5 a 17 años, aunque más es mejor.